Conferencia sobre formación en emprendimiento, un tema a debatir
[vc_row][vc_column width=”1/1″][vc_single_image image=”2227″ border_color=”grey” img_link_large=”” img_link_target=”_self” img_size=”full”][vc_column_text]En los últimos años, parte del modelo empresarial español parece haber evolucionado. En los periodos anteriores a la crisis, que parece estamos dejando atrás, existía la falsa creencia de que el trabajo era para toda la vida y de que algo o alguien nos solucionaba este asunto.
Sin embargo, esto ya no es así. El puesto de trabajo se ha convertido en un bien escaso, y sólo aquellos que sean capaces de salir de su zona de confort lograrán el preciado bien. La enorme crisis atravesada ha evidenciado varios hechos, entre ellos, la falta de productividad de las empresas españolas, el acomodo de empresarios y empleados, y por supuesto un mercado global y muy competitivo en el que sólo los mejores sobreviven.
En este contexto, hemos vivido en periodo de tiempo muy corto una regularización de plantillas para que las empresas se reajustasen a esta nueva realidad. Un reajuste que ha provocado la salida del mercado laboral a muchos trabajadores que ahora tienen muy complicada su entrada al mismo.
Ante esta situación, la opción de muchos de estos empleados ha sido la emigración hacia otros mercados labores, y la de muchos otros el emprendimiento o el trabajo autónomo.[/vc_column_text][vc_column_text]El modelo está cambiando hacia el aumento de relaciones mercantiles entre empresa y trabajador, en lugar de relaciones laborales. Sí que es cierto que la velocidad de implantación del nuevo modelo lo podemos diferenciar por sectores, y vemos como en el tecnológico ya se está asentando. Este nuevo modelo es más flexible, pero también menos seguro para el trabajador. Es un nuevo sistema que yo mismo llamaba en otro post “El súper profesional independiente”.
Pero en este nuevo modelo ¿Es suficiente la formación que tienen nuestros emprendedores? Todo parece indicar que no. Un cambio de modelo laboral requerirá sin duda un cambio de modelo educativo y formativo.[/vc_column_text][vc_column_text]
El modelo está cambiando hacia el aumento de relaciones mercantiles entre empresa y trabajador, en lugar de relaciones laborales
[/vc_column_text][vc_column_text]En este nuevo modelo aparece nuevas habilidades y capacidades que se antojan esenciales, como por ejemplo: adaptabilidad, trabajo en equipos virtuales, conocimientos tecnológicos, pensamiento crítico, gestión del riesgo, inteligencia social, culturalidad o creatividad. ¿El sistema público o privado enseña esto a nuestros profesionales?
Además, el cambio de modelo también requerirá de un cambio en los conocimientos. Si hasta hace pocos años la opción de la especialización era la más sensata, hoy día lo aconsejable es una formación en T. Una formación en que tenemos una base sólida de un conjunto de áreas multidisciplinares, y además, un conocimiento profundo y especializado sobre un área en concreto. ¿Estamos transmitiendo este mensaje desde las instituciones públicas o privadas?
A este respecto, me vienen otras muchas preguntas como por ejemplo:
- ¿Cómo potenciar el espíritu emprendedor?
- ¿Estamos preparando a nuestros jóvenes para el nuevo modelo de empleo?
- ¿Debemos articular nuevos modelos que fomenten el emprendimiento en las políticas activas de empleo?
Participaré en la segunda edición de la “Conferencia Europea de formación” organizada por la Junta de Comunidades de Castilla – La Mancha en la que debatiremos sobre estas preguntas en el taller que modero: ”Formación emprendedora. Modelos para emprender”.
Estoy seguro de que con la participación de los ponentes en esta mesa, junto a todos el público participante, llegaremos a conclusiones acertadas que os contaré en otro post.[/vc_column_text][vc_column_text]Os dejo una fotografía del evento:[/vc_column_text][vc_single_image image=”2378″ alignment=”center” border_color=”grey” img_link_large=”” img_link_target=”_self” img_size=”full”][/vc_column][/vc_row]
José Luis Rubio
27 febrero, 2015 @ 11:25
Excelente post muy claro. No estoy muy de acuerdo en un tema: no creo que muchos de los trabajadores que hayan salido del mercado laboral por la crisis se hayan marchado a otros mercados. Se han marchado jóvenes preparados, los otros se han quedado y precisan una intensiva formación para readaptarse al mercado. Ahora y esto es más importante, tu visión sobre el cambio del concepto “relaciones laborales” a “relaciones mercantiles” es totalmente acertado. Enhorabuena por ser vanguardia de un pensamiento moderno totalmente necesario y gracias, por supuesto, por “promocionar” el Encuentro de Toledo sobre formación el próximo martes.
Pascual Parada
27 febrero, 2015 @ 11:54
Gracias por tus comentarios Jose Luis.
En cuanto a tu observación es cierto, quizás tendría que haber segmentado más. Sí que existe un perfil de trabajadores cualificados que una vez fuera del mercado laboral han emigrado. Para los perfiles de menos conocimientos y recursos, esta opción es cuanto menos muy complicada. Ayudemos a éstos último a reecontrar su puesto y nos habremos ayudado a nosotros mismos de forma indirecta.
Nos veremos el día 3. Un saludo!