El fracaso es el resultado de una persona. El éxito es del equipo.
[vc_row][vc_column][vc_single_image image=”2904″ img_size=”full”][vc_column_text]Una sola persona es capaz de hacer tumbar la más grande de las empresas, sin embargo, para hacer crecer una compañía necesitarás el mejor de los equipos.
Las variables que hacen diferenciar a las empresas de éxito de aquellas que caen son muchas y muy diversas, de tal forma que la gran mayoría de ocasiones es muy difícil valorar cuál de de esas variables es la que lleva a las empresas a lo más alto o a lo más bajo.
En numerosos post anteriores, como por ejemplo en “Las ideas pesan poco en el éxito de los negocios“, os he transmitido la idea de que la clave es siempre la ejecución, y la ejecución corresponde a las personas, por lo que la clave en el éxito de las empresas, en un alta probabilidad de los recursos humanos, del capital humano, de los “activos con patas”, en definitiva de las personas.
Pero ¿De cuántas personas estamos hablando? ¿El cambio de una sóla persona me puede hacer crecer mi negocio?