NO ES UNA CONTRADICCIÓN, SOMOS MÁS FELICES CONFORME AVANZAMOS EN LA EDAD
La felicidad no es un tema que me haya preocupado mucho, será porque me considero una persona feliz dentro de los límites normales del resto de los mortales, aunque tampoco he tenido la urgencia de contrastarlo. El caso es que me he topado con un artículo de Robert Waldinger en el EL ESPAÑOL y me gustaría comentar algunas ideas que ya intuía, y que comparto.
“Sabemos que nos volvemos más felices con la edad, a partir de los 45 o 50 años”. Según Waldinger, a partir de esta edad somos más felices porque estamos más seguros de nosotros mismos, así, no nos dejamos influir por los demás y, además, sabemos que no vamos a gustarle a todo el mundo, por lo tanto, ni lo intentamos. Estoy de acuerdo con esta información, y por ello pongo mi energía en estar bien con aquellos que quiero y dejo perder aquellas relaciones que intuyo que no me aportan nada. Hace poco leía las palabras de un líder empresarial muy en esta línea que decía que no tenía tiempo para todos y por ello le dedicaba parte de su tiempo a aquellos que están motivados para sacar lo mejor de ellos.
Siguiendo con la felicidad y su correlación con la edad, decía el filósofo francés Alain Badiou que el acto de pensar “es lo que nos libera a los mortales de nuestra existencia finita, alcanzando destellos del infinito”. Dicho de otra forma, pensar de forma crítico aporta felicidad, y ese pensamiento crítico se alcanza con la edad (una lástima que no todos lo alcancen 😅). Sigue diciendo Badiou “Pensar contras las opiniones de otros al servicio de la verdad, más que un ejercicio ingrato, es el camino más corto para la verdadera vida y felicidad”. De nuevo, ser feliz es pensar de forma crítica y al servicio de la verdad.
Siguiendo con Waldinger, realizó un estudió de los más importantes sobre la felicidad y concluyó que el dinero no da la felicidad más allá de tener cubiertas unas necesidades básicas. Quizás por eso también la relación entre felicidad y edad. Recuerdo una frase aquí de Woody Allen en una dirección algo contraria: “El dinero no da la felicidad, pero provoca una sensación tan parecida que sólo un experto podría distinguirlo”.
Sé crítico, que mis palabras no direccionen tu opinión, saca tus propias conclusiones. Y si te interesa el tema, profundiza sin preguntarle a ChatGPT, lee y sé feliz!!!