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2 Comments

  1. Luis Nantón
    13 abril, 2015 @ 11:07

    Magnífica exposición. ¡Felicitaciones!. Concretar en exceso pudiera abocarnos a pecar de simplicidad, pero si fuera necesario lo concretaría todo en el último punto: Estrategia. Una empresa, un proyecto empresarial no puede ser direccionado a base de “impulsos”. Con independencia de las siempre cambiantes circunstancias, es necesario tener, mantener y desarrollar una estrategia que pondere todas las posibilidades acometibles. Objetivos a medio y largo plazo, como en la vida, con sus planes de viabilidad, específicos e integrados de conjunto, son brújula indispensable para la correcta toma de decisiones. Buen trabajo.

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